El inbound marketing es justamente lo contrario al outbound marketing: banners, publicidad en televisión, cuando suena tu teléfono y te llama un comercial… Intenta ofrecer al usuario lo que busca, sin «interrumpirle».
El Inbound marketing permite a tus consumidores encontrarte en internet y aprender de tus servicios. Es una estrategia de marketing no intrusiva, en la cual el usuario no siente que se le esta vendiendo algo, si no que se le está ofreciendo valor.
Ejemplo de inbound marketing
Un ejemplo serían las palabras clave de búsqueda por internet. Una gran mayoría de transacciones empiezan con las keyeords en buscadores.
El objetivo de la estrategia de inbound es atraer personas interesadas en un producto o tema concreto, que en marketing online se conocen como leads. Estos pueden llegar como suscriptores a un blog, interesados en un libro de la marca, etc.
Tras ese primer filtro, una buena estrategia de conversión consiste en ofrecer al usuario lo que más le interese: posts en un blog, ofertas o servicios gratis para fidelizar al lead y convertirlo en cliente…
Lo fundamental del inbound marketing es la personalización de la oferta y los contenidos que se ofrecen al usuario. Hay que saber dónde encontrar a nuestro público objetivo y planificar una estrategia para captar a los posibles clientes.
Se podrían resumir las estrategias de inbound como la forma de encontrar personas interesadas en un producto o servicio a través del valor diferencial que la marca ofrece, mientras que el marketing tradicional, te hacia comprar sus productos o servicios por «bombardeando» constantemente mediante diversas plataformas.